Hablar de Faith No More es hablar de esa cuadrilla de visionarios que en el año 1990 le llevaban ventaja a todo el mundo, pero que en poco tiempo dilapidó su fortuna, perdida en un océano de broncas y tensiones, demasiado genio en un mismo barco, probablemente. El caso es que, tras haber lanzado el que quizás haya sido el álbum más complejo y ecléctico de toda la década, Angel Dust (1992) una pregunta rondaba a los fans y al propio grupo: ¿Ahora qué hacemos?, evidentemente, las expectativas sobre el grupo ya eran altísimas, había que colmarlas en la medida de lo posible, y a ello que se puso el grupo.
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